El amor de Franco Miranda por la vida del viajero nació cuando comenzó sus primeros viajes como mochilero. Mediante esta forma de viajar, conoció Argentina, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Chile y México. Pero después, llegó la pandemia y descubrió una nueva forma de recorrer países: en bicicleta.
En esta entrevista exclusiva con Expresión Norte, el viajero contó más sobre sus aventuras sobre ruedas.
¿Cómo y cuándo surgió la idea de recorrer el mundo en bicicleta?
La idea surgió después de volver de mi primer viaje de mochilero por Sudamérica y México (de 1 año y medio). Por la pandemia, decidí armar la bicicleta y salir a viajar nuevamente, pero más tranquilo y con la idea de vivir viajando más tiempo. Mi idea era ir llevando lo necesario, disfrutando de las rutas y con la capacidad de tener una movilidad para llegar a muchos lugares por mi propia cuenta.
¿Qué países visitaste hasta acá?
De mochilero conocí Argentina-Bolivia-Perú-Ecuador-Colombia-Chile-México. En bicicleta Argentina y el sur de Brasil.
¿Cuál fue el más lindo y el más difícil de hacer?
No se aún si alguno de todos fue más o menos difícil. Cada país tiene cosas hermosas para ver, diferentes culturas para ofrecer, como la gastronomía y los paisajes. Hasta ahora Brasil fue más complicado por sus morros, tener que trepar en bicicleta a veces se complica. Pero creo que va a ser más complicado Colombia, ya que la cordillera se reparte en 3 en todo el territorio y allá se pedalea a más de 1000 metros sobre el nivel del mar, lo que hace que no solamente se dificulte por la cordillera sino también por la falta de oxígeno en la altura.
¿Algunas anécdotas breves de tus aventuras?
Anécdotas hay cientos, porque viajo desde el 2018. Solo estuve 1 año y medio parado en mi regreso a Argentina por la pandemia, así que es algo difícil recordar en este momento alguna. De lo más reciente puede ser haber dormido 2 días en una cancha de bochas en el medio de un pueblo costero en Gaivotas, Santa Catarina. La lluvia nos venía corriendo hacía días y encontramos esta cancha techada que nos sirvió como refugio 2 días.
¿Qué significa viajar para vos y por qué en bicicleta?
Más que viajar en bicicleta, viajar significa una sensación de felicidad y libertad. Muchos encuentran eso en su trabajo, o formando familia, o acumulando bienes (auto, moto, etc). En mi caso, viajar y poder estar en movimiento me saca de la rutina. No saber que va a suceder las próximas horas o días, donde uno va a dormir o comer, o a quien vamos a conocer, genera una adrenalina que de alguna manera me hace feliz. Para mí tener poco es tener mucho. Además viajar en bicicleta genera una hermosa sensación de libertad, de moverse despacio disfrutando del aire, del paisaje, de los pájaros y de todo lo que pasa alrededor en el momento que estamos en ruta.
¿Qué objetivos perseguís en estos viajes?
Como proyectos hay muchos, pero en este momento intento proyectar a corto plazo para poder concretarlos. Ahora el proyecto era cruzar el sur de Brasil rumbo a Uruguay, unos 1200 kilómetros por la costa Atlántica, cosa que acabo de concretar en estos días llegando a Chuy (frontera con Uruguay). Y el resto de proyectos es seguir viajando hasta que no pueda hacerlo.
¿Cómo planificas tus viajes? ¿Qué cosas llevás?
Planifico más que todo rutas, lugares… Pero a veces no se planea tanto, nos dejamos llevar por los comentarios y recomendaciones de la gente. Lo bueno de viajar de esta manera es que muchas veces llegamos a hermosos paraísos que son poco conocidos y concurridos por el turismo… A cada viaje llevo bastantes cosas: ropa, mochilas, equipo para cocinar, anafe, algunas herramientas, cosas de aseo personal, y un bolso conservadora donde a veces guardo comida cuando toca hacer tramos largos.
¿Qué bici tenés y cómo esta equipada?
La bicicleta es una Venzo Loki rodado 29, tiene 2 portaequipajes caseros hechos por mí, uno en ruta (ya que el de aluminio que llevaba se rompió por el peso y una familia en San Martín la pampa me auxilió. Pudimos fabricar uno a medida con las herramientas de Damián), y en este momento estoy viajando con otro ciclo viajero, que es brasilero. Este tiene el proyecto de conocer todo Brasil en bicicleta, pero ahora se desvió para conocer la Patagonia rumbo a Ushuaia.
¿Cómo haces para financiar tus viajes? ¿Cómo subsistís?
La clásica pregunta a todo viajero (risas) En lo posible evitar siempre pagar hospedaje. Llevo carpa, una hamaca y lo necesario para acampar y cocinar. A veces salen algunos voluntariados donde intercambiamos trabajo por comida y hospedaje. Además, la mayoría de las veces acampamos en estaciones de servicio, que normalmente tienen duchas y podemos bañarnos. Muchas veces agarro alguna que otra changa para ahorrar. También la gente en la ruta ayuda, vendo stickers y llaveros. Si tengo que lavar baños lo hago, he lavado platos en restaurantes, arreglado camas en hostels, etc.
¿Actualmente a donde te encontrás y hacia dónde vas? ¿Cuándo volvés a Argentina?
Actualmente estoy en Chui frontera de Brasil con Uruguay. La idea es recorrer Uruguay, encontrar algún trabajo para hacerle mantenimiento a la bicicleta y comprar algunas cosas para equiparme mejor. Después de ahí pensaré donde seguir. Salí de Córdoba el 17 de mayo del 2021 y por ahora no tengo planes de regresar.
¿Qué significa “rodando el globo” en pocas palabras?
Rodando el globo es un proyecto de vida ,la idea principal es animar a los demás a cumplir sus sueños, sin condicionarse, ganándole al ego y al miedo que tanto arruina sueños en esta vida. Viviendo simple, con lo necesario, minimalista, esparciendo amor, alegría y demostrando que la felicidad está en la palma de nuestra mano. Todos podemos cumplir nuestros sueños, solo hay que salir, buscarlos y trabajar por ellos.
¿Qué sueños tenés y a qué lugar del mundo te gustaría ir que todavía no fuiste?
Mi sueño era viajar y ya prácticamente lo estoy viviendo. Como sueño más grande tengo el de conocer otros continentes y culturas. Siempre digo que, más allá de los hermosos paisajes que conocemos, lo mejor de todo es la gente que conocemos, las amistades que quedan para siempre. Entender que acá afuera la gente es hermosa y generosa. Y un lugar que quisiera ir y que seguramente iré es Katmandú, Nepal.