Del Club Poeta Lugones a la Selección Argentina femenina de Básquet Adaptado

Luna Díaz tiene 22 años, nació en Catamarca pero hace 4 años juega en el Club Poeta Lugones de Córdoba.

Su historia habla de perseverancia, pasión por el deporte y de amor por un club (Poeta Lugones) que es mucho más que eso. Fue la semana pasada cuando Luna Díaz tuvo la dicha de volver a formar parte de la concentración y los entrenamiento de las “Lobas”, el equipo femenino de Básquet Adaptado de la Selección Nacional. Es que el equipo que se prepara para disputar el próximo Torneo Sudamericano.

Desde Expresión Norte tuvimos el privilegio de hablar con esta “Loba” 100% poética.

¿Cuándo y cómo empezaste a jugar al básquet?

Me vine a vivir desde Pomán (Catamarca) a Córdoba para buscar una carrera para estudiar (terminó eligiendo la Psicología). Ya conocía el deporte por los Juegos Evita, de los que fui parte desde los 12 años. Un día fui a buscar el pase para los colectivos urbanos de Córdoba y conocí a alguien que me invitó a jugar a el equipo de Unión Eléctrica. Ahí empezó todo… Después me hablaron de Poeta Lugones y empecé a entrenar en el club.

¿Qué significa este deporte en tu vida?

Este deporte para mi es libertad, ya que nadie es superior a vos en una cancha y todos pueden hacer lo mismo si lo quieren, porque pueden. Para mi es hermoso y mi cable a tierra, donde me siento en paz pero a la misma vez con muchas ganas.

¿Desde cuándo jugas en el club Poeta Lugones y en qué puesto de la cancha lo haces?

Juego en Poeta Lugones desde hace 4 años. Mi puesto es de alero, de base algunas veces, o ayuda base. Todo depende con quien esté jugando. Lo que más me gusta de este equipo es que nunca nos rendimos, siempre encontramos la parte buena de las cosas y nos damos todos una mano cuando lo necesitamos.

“Siento que puedo darle a la Selección compromiso, dedicación, y ganas”

¿Cómo fue esa concentración con la selección Argentina de básquet adaptado?

Fue una concentración de 7 días en total, desde el 18 al 24 de enero en las instalaciones del club Cedima, en La Matanza (Bs.As.). Después de un año sin poder concentrar por la pandemia fue algo hermoso y con todos los cuidados requeridos.

¿Ya habías sido convocada otras veces? ¿Qué sentís que podes darle a la Selección?

Si, estoy en Selección hace 2 años. Ahora nos estamos preparando para un Sudamericano en Colombia. Siento que puedo darle a la Selección compromiso, dedicación, y ganas.

“Ser una Loba se siente muy bien, es ser parte de la manada. Entre todas nos sumamos y tenemos un mismo objetivo”

¿Qué proyectos tenés para este año y cuáles son tus sueños?

Para este año quiero formar parte de las 12 jugadoras que viajen a los torneos y que me vaya bien en mi carrera universitaria. Mis dos sueños son: poder llevar a la Selección Argentina a lo más alto y ser una psicóloga.

¿Qué sentís al ser una “Loba”?

Ser una Loba se siente muy bien, es ser parte de la manada. Entre todas nos sumamos y tenemos un mismo objetivo. Es luchar juntas por todo y para todo. Ser una loba es hermoso.