Desde el 29 de junio hasta el 3 de julio, se lleva a cabo la Semana de la Innovación Social 2020: “Activá tu mente, inspirate”. Se trata de un evento único de 5 días para descubrir, conocer e inspirarse con proyectos innovadores que están cambiando la realidad de la Argentina. En este contexto, el Centro de Jubilados de B° Talleres Este y Oeste, presentó el proyecto de un “bastón inteligente”.
“Nos presentamos el año pasado en el primer Hackathon Abuel@s+Niet@s de Córdoba. Había 30 inventos innovadores y quedamos primeros con el bastón inteligente Baus”, expresaron orgullosas Graciela y Mabel, del Centro de Jubilados en la exposición de las Finales Regionales de Córdoba de “Mentes Transformadoras”.
Uno de los problemas y miedos en los abuelos son las caídas. El miedo a caerse está vinculado también a la necesidad de solicitar auxilio cuando esto ocurre. En este sentido, pensaron diversos dispositivos y se decidieron por un bastón inteligente que activa alarmas en vecinos o familiares cuando percibe un movimiento asociado a una caída, entre otros servicios.
“Es un producto innovador, ya que en el mercado solo existen bastones de apoyo. La idea surgió a través de una señora mayor que tuvo una caída y estuvo expuesta en el piso durante 3 horas hasta que llegó una visita a socorrerla. Está dirigido a todas las personas que dependen del bastón, especialmente adultos mayores que viven solos”, explicaron.
Sobre su confección remarcaron: “Está hecho de material sustentable como es la reacción de aluminio de alta resistencia. Su peso es muy liviano y cuenta con plaqueta. En el mango, una luz led que permite iluminar el paso ante la poca visibilidad; en su interior, una alarma de caída automática ante el mínimo movimiento brusco o caída, para solicitar atención rápida en caso de emergencia; y un sistema de notificación micro controlador junto a un módulo bluetooth y acelerómetro. Ante una caída, el bastón envía una señal por bluetooth al celular para notificar vía mensaje de texto a tres contactos: medico, familiar o vecino y emergencia, por ejemplo. Su base de apoyo es antideslizante para mayor seguridad y estabilidad, tiene una batería como un celular y una plaqueta de emergencia solar para su recarga”.
“Queremos que se pueda vender en casas de ortopedia, electrónicas, farmacias y obras sociales, ofreciendo mejorar la calidad de vida y seguridad para los adultos mayores. Es un gran invento innovador y estamos esperando contar con el apoyo del Gobierno y la Municipalidad, la Fundación Nobleza Obliga y Ortopedias; y alumnos de la UTN que van a diseñar la plaqueta. En un fututo queremos que se adapte también a un andador o muleta”, concluyeron.
El prototipo
Junto a Graciela y Mabel, trabaja en este proyecto Rafael, quien hoy se encuentra en Italia. Además, colaboran Joel Grenethier y Martín Trovato, alumnos de la UTN.
“El día del hackathon, usamos las mismas botellas descartables que nos dieron en el almuerzo para fabricar el bastón de plástico que sirvió como prototipo. Con envoltorios metalizados de alfajores simulamos la plaqueta de energía solar, y le pusimos auriculares en el ‘botón de conectividad'”, nos explicó Graciela.