“La Colectiva” promueve encuentros de soberanía alimentaria basada en plantas

"Mi olla, mi decisión", es el nombre de la iniciativa brindada por el colectivo popular, buscando brindar derecho a saber qué comemos, a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestras ollas. En Córdoba, en el comedor y merendero “Corazones Felices” de la Cooperativa Esperanza en B° Argüello, están desarrollando talleres de alimentación antiespecista.

“Mi olla, mi decisión”, es el nombre de la iniciativa brindada por “La Colectiva”, organización política, social y feminista, buscando brindar derecho a saber qué comemos, a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestras ollas.
El proyecto de Soberanía Alimentaria brindado por La Colectiva busca generar conciencia sobre lo que comemos y nos concentramos en la soberanía alimentaria basada en plantas, además de estimular el desafío de comprometernos con la salud individual, comunitaria y del planeta.
“Creemos que empezar a discutir y a experimentar colectivamente este camino no es para quienes ya saben todo de todo, sino para quienes quieren integrar las luchas sociales contra la pobreza, la discriminación”, señalan desde la organización.

Tejiendo soberanía alimentaria

Los encuentros se realizan en el  Comedor de la Cooperativa Esperanza, en barrio Argüello, con el apoyo del Programa Alimentando el Mañana y a Liquen por la propuesta.
El proyecto tiene varios motores: “por un lado, La Colectiva. Por otro lado, en dos barrios de la Provincia de Buenos Aires logramos, junto a la Fundación SES, alimentos para 200 personas, por supuesto basados en plantas y donde contamos con una nutricionista y una médica veganas que dan talleres a las vecinas que reciben los alimentos, y donde nosotras hicimos las primeras experiencias de talleres y encuentros donde vinculamos nuestra experiencia de feminismo popular con la del veganismo que estamos integrando”.

“ser vegana no es de cheta y que las mujeres y diversidades de los sectores populares tenemos el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestros alimentos, y la obligación de trabajar por la salud colectiva, por la tierra y por todos los seres que la habitan”

“Decimos que ser vegana no es de cheta y que las mujeres y diversidades de los sectores populares tenemos el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestros alimentos, y la obligación de trabajar por la salud colectiva, por la tierra y por todos los seres que la habitan”, afirmaron.

Algunas recetas para implementar…

Albóndigas: Porotos negros: 70g – Cebolla: 20g – Almidón de Maíz (maicena): 10g – Condimentos y sal a gusto /// Procedimiento: Remojar durante 12 a 24 h los porotos negros en un recipiente con el triple de agua. Pasado este tiempo, eliminar el agua de remojo y cocinar durante 45/60 minutos o hasta que estén blanditos los porotos. Una vez cocidos, mixear o procesar ⅔ de los porotos y agregar la cebolla picada y el almidón de maíz, condimentar y sal a gusto.

Arroz y la salsa de fileto: Arroz: 70 g – Cebolla: 30g – Tomate fresco: 30g – Laurel, orégano, pimentón, pimienta y sal a gusto /// Procedimiento: Cocinar el arroz en el doble de su volumen en agua. Por otro lado, cortar la cebolla y el tomate fresco, y sofreír en sartén o cacerola, agregando agua hasta lograr una salsa, junto al laurel y demás especias. Una vez que estén las albóndigas, agregarlas a la salsa. Servir el arroz y encima la salsa con las albóndigas.

Más info: Instagram: corriente_la_colectiva