Por Casandra Quevedo
“Hacé Pintar” nació en el año 2016, cuando Rocío y Anita estaban militando en los barrios populares y tuvieron una gran idea para transformar la realidad social que veían todos los días y les dolía. Al comienzo se abocaron en dar talles para jóvenes, pero después ese proyecto fue creciendo y armaron el colectivo “de pibas” que salen a muralear en espacios públicos, plazas, etc.
“Ambas elegimos construir desde el camino de la cultura porque creemos que desde ahí se encuentra eso que guía y opera en nuestras acciones cotidianas y nuestra manera de ver el mundo. También es ahí donde se encuentra la semilla de cualquier transformación social”, explicó Rocío. La pintora también aclaró que desde “Hacer Pintar” les interesa trabajar con jóvenes que por sus condiciones estructurales no acceden a las mismas cosas y tienen vulnerados sus derechos en diferentes sentidos.
En esta entrevista con Expresión Norte, algunas integrantes del colectivo contaron más sobre su increíble proyecto.
¿Cómo está conformado “Hacé Pintar”?
Sofía: En la actualidad al colectivo lo integramos 13 pibas de la ciudad y el interior de Córdoba, preocupadas por la realidad social, sus desigualdades y la posibilidad de transformación. Nos encontramos porque creemos que la realidad es susceptible de ser transformada de manera colectiva, apostando a la intervención artística en el espacio público para visibilizar, reflexionar y tomar acción sobre problemáticas sociales. Forman parte, además, diversas personas que nos acompañan en las intervenciones (referentes barriales, vecinos, vecinas, y jóvenes de organizaciones territoriales). La invitación está abierta a quienes sientan y quieran sumarse a esta propuesta, pueden contactarse a través de nuestras redes @hacepintar.
¿Cómo se organizan para pintar?
Rocío: Tenemos una organización interna súper horizontal y colaborativa. Yo soy una de las coordinadoras, sobre todo en lo que es Córdoba Capital. Cuando tenemos una inquietud o algo que queremos pintar buscamos paredes. También hemos ganado muchas convocatorias y sido contratadas por la Municipalidad para llevar a cabo nuestro proyecto. A nosotras nos interesa generar un diálogo con el Estado, porque consideramos de base que el recurso para lo cultural debe ser garantizado desde ahí. Pero también denunciamos y reclamamos todo lo que creemos que este mismo incumple. Muchas veces operamos de manera autogestiva, conseguimos los recursos, diferentes pinturerías han apoyado el proyecto y generalmente distintas instituciones barriales u organizaciones nos donan sus paredes para plasmar murales sin ningún problema.
¿Cómo eligen los lugares a intervenir?
Rocío: Elegimos los lugares en función de mensaje del mural, su contexto. Pero también depende del barrio dónde estamos trabajando, ya sea un proyecto a corto, mediano, o largo plazo. Nos interesa democratizar los accesos, y que esta actividad cultural llegue a todos los barrios de Córdoba. No se trata solo del momento de pintar, que ya es poderoso en sí mismo, para nosotras el muralismo es una actividad social. Nos interesa el proceso que se da hasta llegar al concepto, que lo construyamos colectivamente y que ahí adquiera del todo su sentido.
¿Qué objetivos persiguen?
Rocío: Este Colectivo existe con la intención de generar espacios reales de inclusión para debatir y accionar sobre problemáticas contemporáneas. Principalmente sobre las desigualdades que se dan en las estructuras de nuestra sociedad. Nuestra construcción es simbólica: buscamos trabajar en nuestra propia identidad como una manera de volver a mirar con pensamiento crítico, pero también con ternura eso que somos como colectivo y comunidad. Construir un enfoque desde lo local, lo latinoamericano. Intentamos crear un espacio, donde no operen más entre nosotres las lógicas patriarcales ni neoliberales.
¿Por qué la frase “venimos a transformarlo todo”?
Sofía: En el marco de las acciones por el 8M, como colectivo, creímos importante intervenir el espacio público visibilizando las situaciones de vulneración por las que atravesamos mujeres y disidencias. Con este mural decimos “Venimos a transformarlo todo”: aquello que nos oprime, que nos vulnera y que no nos habilita a ejercer nuestros derechos plenamente. Estamos convencidas que está transformación sólo es posible impulsada y sostenida como colectivo que se acompaña y se abraza en las adversidades y conquistas.
¿Cuál fue la temática que plasmaron en el mural que hicieron en barrio Providencia hace poco?
Julieta: Nos unen las luchas y las ganas construir para hacer del espacio que habitamos un lugar mejor. En el barrio providencia construimos un mural que proviene de la lucha de las mujeres durante años. La idea de lo que pintamos colectivamente es lo que emergió de un proceso cargado de debate y encuentros con la comunidad, donde había un montón de sentimientos, entre ellos impotencia por las compañeras que no están y por cada femicidio que se anuncia cada día. Optamos por la línea de ser propositivas y construir desde lo cultural una sociedad con justicia social, sobre todo para las mujeres y disidencias.
Contacto: Instagram @hacepintar
