¿Qué representa el vóley en tu vida?
El vóley representa mi vida. Desde el momento en que pisé una cancha de vóley, mi vida cambió y fue un antes y un después. Desde ese momento se aceleró mi vida de un momento para otro y fue un cambio abismal, por el cual me dediqué al 100% a esto que amo y sigue siendo mi vida: el vóley.
Los valores que se inculcan son muchísimos: la unión, aprender a trabajar en equipo, el respeto por el otro, aprender a convivir, a aceptar diferentes situaciones, a perder, a ganar, a planificar objetivos a corto y largo plazo… ¡son innumerables!
¿Qué te genera el Club Poeta Lugones?
El Club Poeta Lugones es el club donde empecé, es el club de la esquina de mi casa, es donde crecí, donde vi jugar a mis hermanos y a mi mamá, donde empecé a tener mi grupo de amigos… Significa un gran amor, la verdad, porque es el club del barrio y creo que para toda la gente de Poeta Lugones y del Sagrada Familia, el Club significa lo mismo que para mí: una gran familia.
¿Te gustaría ser entrenadora en un futuro?
No me veo como entrenadora. Si tengo que elegir una camiseta para retirarme cuando deje de jugar, sería la de Gimnasia Esgrima de la Plata… porque viví muchísimas cosas en ese club, también cuando me fui a jugar mi primera liga a La Plata. Hice una promesa, asique tengo una cuenta pendiente con Gimnasia.
Cuando deje de jugar no me voy a dedicar para nada al deporte. Pienso que seguramente cambiaré de ámbito al 100%.
¿Cómo estás viviendo la cuarentena? ¿De qué forma cambió tu rutina?
Esta cuarentena a mí me vino bien, porque en realidad yo venía muy cansada física y 
mentalmente. Venía acarreando muchísimas lesiones, y me da tiempo de descansar, recuperarme, tratar las lesiones y amoldarme. Aproveché para hacer millones de cosas, y aprendí a hacer muchas nuevas que ni siquiera sabía que me interesaban. Realicé el profesorado de yoga, que hacía mucho que lo quería hacer y por una cuestión de tiempo y de exigencias físicas que requiere esta actividad, no podía hacerlo durante competencias y entrenamientos, y un montón de cosas más. Por ahí, como dije antes, el hecho de estar entregada al 100% al vóley me impide hacer un montón de otras cosas; y ésta fue una buena oportunidad para sacarme las ganas.
Ahora seguramente vaya a entrenar al Club Poeta Lugones, porque se me ha abierto la posibilidad de volver a entrenar por ser jugadora olímpica. Asique la gente del Club me está haciendo el favor de prestarme la cancha. Estamos tratando de dejarla en las mejores condiciones para que el entrenamiento sea lo más profesional posible.
¿Qué balance hacés de tu carrera en Europa?
El balance de mi carrera en Europa es super positivo. La primera vez que fui tenía 18 años, y me faltaba mucho para aprender. Después volví a La Plata, y después a Francia. Ahí se me abrieron las puertas increíblemente. Tuve la posibilidad de crecer, de desarrollarme en esa liga. Por algo viví tanto tiempo en Francia.
Pasé por diferentes clubes, hasta que llegó un momento que sentí que ya había llegado a mi límite y decidí probar otras ligas. Me fui a la liga de Brasil, que es una de las ligas más fuertes del mundo. Después me quedaba por recorrer y probar Polonia. La verdad que no fue una buena experiencia, porque, comparada con Brasil, siento que la liga brasileña es mucho más fuerte. Asique mis planes para futuro tienen que ver con eso: si todo esto mejora después de la cuarentena, quizás vaya para Brasil. Y sino, ya veremos. Todavía no está decidido.
Una jugadora “de Selección”
A nivel Selección, ¿Cómo es ser una “Pantera”? ¿Qué significa ser la capitana de la Selección Nacional?
Ser “Pantera” para mí es un gran orgullo. Me siento muy afortunada y agradecida por poder formar parte de este grupo de panteras que está haciendo historia en el vóley femenino. Hubo un gran cambio. Yo llegue justo en un momento en que el vóley femenino estaba empezando a crecer. Conseguimos resultados históricos y me siento muy orgullosa. Veo videos de todas las cosas que vamos consiguiendo y me sorprende a mí misma.
Me siento responsable, como capitana, de pasar el mensaje de cuán importante es el vóley femenino. Es un deporte que se practica en el país por un montón de chicas, y todos los pequeños detalles necesitan una gran atención para llegar a la profesionalización de este deporte. Me siento responsable un poquito de llevar esta cinta por el vóley femenino, más que por las Panteras, que en este momento no están compitiendo. Así que lo estoy dejando todo para que eso suceda.
Obviamente también me siento muy orgullosa de ser capitana de Las Panteras. En un principio la capitanía me llegó de sorpresa. Pero creo que los años que llevo jugando, la experiencia y el mensaje que puedo transmitir al equipo es positivo… siempre fui muy mediadora, siempre en búsqueda de que el equipo funcione y que todas trabajemos por el mismo objetivo. La verdad que sí, siempre soñé con tener este rol, con poder transmitir un mensaje diferente a mis compañeras. Es una gran responsabilidad, que al principio no fue fácil, pero lo hago con gusto y con muchísimo amor por este deporte.
“El vóley es un deporte muy lindo y muy practicado en todo el país, y merece ser tenido en cuenta por la cantidad de chicas que hay entrenando.”
¿Qué crees que le falta a la Selección para explotar definitivamente y obtener algún título? ¿Qué te genera la incertidumbre respecto de los Juegos Olímpicos de Tokio?
Creo que lo que le falta a la Selección para obtener más resultados es simplemente seguir por el mismo camino. Creo que la selección ha mejorado mucho en los últimos años, pero falta que se siga desarrollando el vóley a nivel escuela, club y liga nacional. Creo que, si se mejora esa base, la Selección va a seguir creciendo.
La incertidumbre de los Juegos la manejo con calma. Creo que va a ser lo que tenga que ser, como estuve muy de acuerdo con que se posterguen porque creo que la salud es lo primordial en este momento, asique si se llegaran a postergar nuevamente o si se cancelaran, sería por esa misma razón y lo entendería. Me dolería mucho por mis compañeras. Yo ya cumplí el sueño de los Juegos Olímpicos, pero la gran mayoría de mis compañeras no. Y es algo que tienen muy merecido porque vienen trabajando hace bastante.
“Creo que la selección ha mejorado mucho en los últimos años, pero falta que se siga desarrollando el vóley a nivel escuela, club y liga nacional”
La lucha por un deporte femenino profesionalizado
Sos una luchadora por la profesionalización del vóley, ¿Cómo vas con ese “partido”?
Respecto a la profesionalización del vóley, soy una de las impulsoras. Pero luego de eso, se generó un colectivo Doble Cambio, que está trabajando para ir ganando pequeños partidos en el camino hacia la profesionalización. Estamos avanzando y especializándonos en cuestiones de género, porque creemos que es a partir de ahí que aparecen las diferencias a lo largo de la historia que se ven reflejadas hoy en día en un vóley desigual, como sucede en todos los deportes femeninos. La desigualdad que existe entre el deporte masculino y el femenino tiene que ver con una cuestión histórica de que siempre se pensó que el deporte era para hombres, y por eso se le ha dado tanta importancia y apoyo al deporte masculino y no tanto al femenino. Es un partido que es largo, pero se viene avanzando paso a paso.
Para mí, lo primordial es que se le empiece a dar cada vez más importancia a todas las pequeñas cuestiones de gestión que se puedan mejorar.
“La desigualdad que existe entre el deporte masculino y el femenino tiene que ver con una cuestión histórica de que siempre se pensó que el deporte era para hombres”
¿Cuáles son tus materias pendientes dentro del vóley?
Me siento muy orgullosa de la carrera que he construido. Lo que me queda pendiente es ver una liga profesional de vóley en la Argentina, donde todas las chicas que juegan porque admiran a las Panteras y que sueñan con ser Panteras algún día, tengan la oportunidad de serlo y de desarrollarse en nuestro país.
Por último, ¿Quién es Julieta Lazcano? ¿Cómo te describís como persona y como jugadora?
Julieta Lazcano es la misma adentro y afuera de la cancha, así que es la misma persona que la jugadora. Me estoy descubriendo día a día, como todos. Me gusta muchísimo divertirme, soy una persona recontra curiosa. Creo que me queda muchísimo todavía por descubrir en esta vida, siento que tengo muchísima energía y me gusta compartirla con mis compañeras.
Esa es Juli…una chica con muchísima energía y ganas de disfrutar de esta vida.
