La ex planta de la Coca Cola en Av. Castro Barros, un emblema de la zona norte

La fábrica embotelladora de la famosa gaseosa fue inaugurada en 1945 y funcionó hasta 1999, cuando la producción se mudo a un nuevo precio en la localidad de Monte Cristo.

Córdoba es maravillosa por sus calles e edificaciones: la Manzana Jesuítica, la Catedral, la Cañada, la iglesia de los Capuchinos, entre tantos otros. Esas arterias y construcciones icónicas son el orgullo de todos los cordobeses y puntos de atracción para numerosos turistas que la visitan desde distintas regiones del país y del mundo para conocerlas.
A su vez, cada barrio tiene sus construcciones y lugares emblemáticos que forman parte del patrimonio arquitectónico y cultural de cada zona: Alberdi tiene al Hospital de Clínicas, el edificio del antiguo Mercado Municipal, la Cervecería Córdoba y su simbólica chimenea que fue demolida a pesar de la encarnizada resistencia de los vecinos, el Gigante de Alberdi (estadio del Club Atlético Belgrano), y “La Piojera”, el excine-teatro Colón (antes Cine Moderno); Nueva Córdoba tiene al Paseo del Buen Pastor en el edificio que cobijó la cárcel de mujeres durante casi un siglo y al Palacio Ferreyra que en la actualidad alberga al Museo Superior de Bellas Artes Evita; Alta Córdoba tiene La estación del Ferrocarril Central Córdoba, luego General Belgrano, la Iglesia y colegio de las Mercedarias, “El Monumental de Alta Córdoba” (estadio del Instituto Atlético Central Córdoba); San
Martín tiene la cárcel, la Casa Cuna, el cine Ideal y… la Coca Cola.

El desembarco de la “Coca”

En este artículo recordaremos (recordar del latín re-cordis, volver a pasar por el corazón) a uno de los íconos de la zona norte, la ex planta de Coca Cola, ubicada en la avenida Castro Barros a metros de la Av. Caraffa. La famosa gaseosa comenzó a comercializarse en argentina en 1943 yen 1944 se instaló una planta de fabricación de la misma en Córdoba, la primera en el interior del país, ubicada en la calle Humberto Primero 477. En 1945 la empresa se trasladó a la Av. Castro Barros 1502 e inauguró en las nuevas instalaciones las líneas de producción más modernas de la época.
En ese entonces, la zona estaba repleta de terrenos baldíos pero poco a poco se fue poblando y con el devenir de los años, la Av. Castro Barros se convirtió en lo que es hoy: una calle comercial repleta de locales de venta de diversos productos, sobre todo automóviles y muebles, y una de las arterias más importantes de Córdoba Capital, ya que conecta el centro con la zona norte de la ciudad.
A su vez, con el paso del tiempo, el tradicional edificio de la Coca Cola no solo se convirtió en un símbolo de la Córdoba industrial y pujante, sino también en un emblema del barrio como la Cervecería Río Segundo o la penitenciaría.

Más de 50 años…

La embotelladora de Coca Cola funcionó en esa manzana de la Castro Barros por más de 50 años. Durante ese tiempo el viejo edificio se fue agrandando en varias oportunidades con el fin de aumentar la producción para responder a las demandas de una sociedad que creció considerablemente en esos años. Terminó siendo un predio de 12.000 metros cuadrados.
Como la ciudad también se expandió, la fábrica, que al inicio de sus actividades estaba en un barrio periférico, quedó enclavada prácticamente en la zona central de la ciudad. Esa circunstancia y la necesidad de aumentar la producción, para ello se necesitaba una planta de mayores dimensiones, provocaron que la empresa decidiera mudar la empresa a una nueva instalación camino a la localidad de Montecristo, en el cordón industrial de Córdoba.
El 3 de diciembre de 1999, en la planta de la Av. Castro Barros, Embotelladora del Atlático SA (Easa) envasó la última botella de la bebida gaseosa. A más de un vecino y empleado de la fábrica se les piantó un lagrimón, se abandonaba un edificio que se había constituido en un emblema de la zona y quedaba una mole de cemento en desuso que brindaba y brinda una imagen de abandono.

En más de 20 años, mientras el barrio y la ciudad siguieron su desarrollo, el predio de la ex fábrica de Coca Cola no ha sido utilizado, por más que es un bocado muy apetecible para las empresas desarrollistas.

El predio ocupa una manzana completa -entre Mediterráneo y el Colegio de la Inmaculada-y tiene una superficie de 15.000 m2. En 2010, se habló de un proyecto que contemplaba un emprendimiento de usos mixtos: comercial y residencial en sus más de 10.000 metros cuadrados. Pero al día de la fecha, nada se cristalizó. Mientras tanto, para el inconsciente colectivo, Coca Cola continúa burbujeando en aquel histórico predio de Av. Castro Barros.