Pulseras de Amistad: El proyecto de “Huellas” para esta Navidad

Con la ayuda de abuelos y niños que visitan cada sábado por la tarde, la ONG con sede en Córdoba, confecciona pulseras solidarias y tarjetitas para acompañar a personas en situación de calle

 

En su búsqueda constante por conectar a jóvenes voluntarios con niños y ancianos, de comedores y hogares, la organización social Huellas llegó a Córdoba en 2021 expandiendo los valores de la solidaridad, el compañerismo, la entrega y el amor incondicional.

Con la ayuda de abuelos y niños que visitan cada sábado por la tarde la ONG, se confeccionan pulseras solidarias para personas en situación de calle. Rocío Heredia, Referente de Huellas en nuestra ciudad, nos brinda más detalles.

¿Cómo nació HUELLAS?

Surgió el 23 de junio de 2007 en La Plata, de la mano de Ezequiel, fundador de la ONG, quien comenzó en solitario un proyecto que se volvería gigante. Huellas es altamente organizada, equitativa y compañera, tiene una base humana muy fuerte, pero también normas minuciosas que le permiten hacer un equilibrio entre la solidaridad y el compromiso.

¿Cuál es su misión?

Hacer algo por el otro, hacerlos protagonistas cuando algunos se sienten invisibles y mostrarles como ellos también pueden hacer algo por el otro desde su lugar, a través de los proyectos. Todos podemos ayudar y hasta en las pequeñas cosas uno puede ser solidario.
Más específicamente, es el servicio a la comunidad con niños de comedores y adultos mayores en residencias geriátricas, esta misión sostiene la esencia de la ONG y la intención de los voluntarios. Tiene como objetivos integrar a los niños y los ancianos en diferentes proyectos orientados hacia un sector distinto en necesidad o vulnerabilidad al que se pueda asistir de alguna forma.
Además, busca la socialización de un equipo solidario que pueda comprometerse con las comunidades que nos reconocen y esperan, para garantizar el funcionamiento de la ONG.

¿Cuándo comenzó a trabajar en Córdoba?

Ezequiel, el fundador de Huellas, es quien lo inaugura en Córdoba el 30 de octubre de
2021, en el asilo La Morada, con un grupo de voluntarios. Desde entonces, se visitan diferentes residencias geriátricas y comedores dentro de la ciudad de Córdoba Ciudad, y se realizan diferentes actividades. Se da durante los sábados a la tarde y en dos horas de voluntariado. Hay un coordinador y un escolta que toman la posición de guías.

Con los ancianos, se juega al Bingo, se realizan manualidades, se trabaja sobre el proyecto actual, y se canta y se baila. Mientras que en los comedores, se organizan
juegos con los niños y actividades recreativas, y también se trabaja sobre el proyecto vigente. La ayuda más importante para sostener Huellas son personas voluntarias con intención de ayudar, pero Huellas también acepta donaciones, además de ofrecer pasantías. Como lo bueno se comparte, es muy útil difundir Huellas para que más personas puedan hacer algo por el otro.

Con la colaboración esencial de los niños, hicimos maracas, cancioneros y bingos para las tardes en las residencias geriátricas; y hace poco finalizamos un proyecto donde hicimos sopas de letras en afiches grandes, con palabras positivas para que se puedan pegar en salas de hospitales y que sea más fácil para el paciente internado lidiar con la soledad y el aburrimiento. Todos estos proyectos son dichosos porque hacemos sentir bien al otro y nos sentimos contentos de hacer una buena acción.

Una caricia al alma de todos

¿Qué acciones tienen previstas para Navidad?

Este año, como en los anteriores, se espera hacer una merienda navideña, se lleva comida y se hacen actividades menos reglamentadas porque es el último sábado antes de salir de vacaciones y se espera lograr una despedida grata, hacerlos sentir acompañados y esperar que sus circunstancias de vulnerabilidad pesen menos.
Estamos trabajando sobre el proyecto de Pulseras Solidarias que está destinado tanto a las personas en situación de calle como a los abuelos y los niños. Algo de lo que más sufren las personas en situación de calle es la pérdida de la vinculación afectiva, son personas abandonadas, por eso aparecen las pulseras de la amistad como un símbolo de unión, donde además los niños y ancianos pueden ver que son capaces de hacer algo por el otro desde su lugar. Estas pulseras, confeccionadas a mano, son entregadas junto con la tarjeta decorada durante los sábados y un mensaje.

Así, se busca que se pueda expresar esperanza y compañerismo para quienes creen que están solos. Las pulseras, son hechas con amor y dedicación, y son un símbolo de solidaridad, con un mensaje claro: “No estás solo”. Para las personas en situación de calle, recibir este regalo es muy significativo, ya que se sienten valoradas y menos aisladas.

¿Un mensaje o reflexión final?

Queremos ejercitar la empatía y recordar que el mundo está poblado de gente que se siente y está sola, pero uno mismo desde su lugar, por más pequeño que se sienta, es capaz de hacer la diferencia y acompañar al otro. El mundo cambia con lo que le damos, y está en nosotros saber mirar a un costado para conseguirlo.

Más info: @huellas.social

huellas.social

Voluntariado en Córdoba