Son cordobeses y recorren Italia en bicicleta con su perrita

Salieron de Villa María hace dos años para comenzar una "aventura familiar". La misma se extendió en el tiempo y a 13 mil kilómetros.

Por Casandra Quevedo

Bicicleta

Otros dos cordobeses lograron cumplir el sueño de muchos: viajar a Europa, y cambiar su calidad de vida, tanto como para poder recorrer todo el país en bicicleta junto a su perrita Piri. Todo empezó hace 2 años y se convirtió en una gran aventura que Carla Vales (oriunda de Villa María) y Leonardo Santi (de La Playosa) documentan en su cuenta de Instagram happyhours_biketravel.

Viajar con una mascota

Hoy llevan recorrido más de un 60% de Italia, algo así como 13 mil kilómetros. En cuanto al viaje con su mascota, los viajeros aseguraron que nunca fue una opción dejarla en Argentina, ya que son una gran familia. Por eso, planificaron muy bien su viaje: “Viajar con mascotas así como viajar con niños es posible. Requiere más flexibilidad, a veces más planificación y obviamente tiene limitaciones para ciertas cosas, pero la felicidad es verdadera cuando es compartida”.

Mientras estuvieron recorriendo varias ciudades italianas, llevaron a su perrita de 10 años y poco tamaño en un canasto que colocaron detrás de una de sus bicicletas. Además, para su comodidad, planificaron paradas cada 40 minutos para que Piri pudiera estirar sus patitas y hacer sus necesidades.

Cómo recorrer todo un país en bici

“Tenemos poco dinero y no tenemos miedo. ¿Pero qué pasó? Vino el covid y nos tenemos que adaptar. ¿Cómo hacemos para recorrer? O era a pie o a bicicleta, y partimos”, contó Leonardo.

¿Cómo hicieron para poder financiar su viaje? Al principio lograban subsisir vendiendo postales. Además, en cuanto al alojamiento, usaban la app Warmshowers, que ofrece hospedaje gratuito a ciclistas.El ciclista agregó: “Eso andaba bien, porque nos alcanzaba para comer y la verdad es que nuestra vida es muy económica, porque dormimos en carpa, compramos siempre en supermercado y nos cocinamos”.

“Te cambia la vida”

Si algo rescata la pareja sobre su gran aventura en Europa, es el cambio en la calidad de vida, que se refleja en lo más mínimo: “Te cambia la vida cuando te venís de allá para aca porque dejas de contar continuamente cuándo aumentó el dolar. Vas al supermercado y todos los días las cuesta igual, todo te sale lo mismo. Entonces, partiendo de un sueldo que siempre es igual y de gastos que no cambian, te alcanza a programar”.

Un giro inesperado

Si bien Europa tiene esa ventaja de poder “planificar”, la pandemia del coronavirus cambió muchas cosas a la fuerza en el mundo. Una de ellas fue la circulación a partir de las restricciones. En Italia, las ciudades se comenzaron a clasificar según colores, dependiendo de la gravedad de la enfermedad, por lo que Carla y Leonardo decidieron tomar una decisión.

“En septiembre vinimos a Cles a cosechar manzanas para poder ahorrar y poder seguir. Al final nos agarró esto de la pandemia”, expresó Carla. Después, otra cosa inesperada que les pasó es que ella tuvo que ser operadade cálculos en la vesícula y al mismo tiempo, varias rutas de Italia fueron bloqueadas.

Por eso, se quedaron en la región del norte de Trentino, aprovechando para trabajar hasta poder salir nuevamente de viaje: “Hoy por hoy estamos un poco ansiosos, esperando el momento de volver a partir y aún no sabemos cuándo será”

¿Próximos destinos?

Su nuevo plan es seguir en dirección este, para llegar al límite entre Europa y Asia: “Serán más de cuatro mil kilómetros atravesando países totalmente desconocidos por nosotros como Croacia, Serbia, Macedonia, Grecia, entre otros”, concluyeron.