Su propio “Papá Noel”: el niño que vendió arbolitos de navidad para comprar su regalo

Joaquín deseaba para esta navidad un nuevo celular, pero como sabía que era mucho gasto para sus padres, decidió poner manos a la obra y con mucho talento armó unos arbolitos súper originales para vender.

Por Casandra Quevedo

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La historia de Joaquín Viggiano es muy conmovedora y digna de un cuento de navidad. El niño de 12 años que vive en la localidad de Las Perdices, había aprendido a soldar junto a su papá. Por eso, tuvo la idea de armar arbolitos navideños de hierro para vender en esta época y alcanzar su objetivo de comprarse su propio celular.

Niño Mágico

Se nota que Joaquín es muy especial. Su mamá contó a medios locales que “es un gran dibujante y le gusta la idea de construir y crear”, tanto, que al modelo de los arbolitos que vendió lo creó él mismo. Pero eso no es todo, para su edad, muestra una gran madurez: en vez de querer el aparato para descargar juegos, su idea era tenerlo para leer libros digitales.

Además, en cuarentena aprendió por su propia cuenta mitología griega, y acaba de terminar la escuela primaria con muy buenas notas. Sin dudas, obtener el celular iba a ser un gran premio para cerrar su año.

Ilusión Navideña

Guadalupe, mamá de Joaquín le había pedido a su hijo que le hiciera un arbolito de hierro para poner al frente de su casa como decoración. Ese fue el puntapié para que el niño terminara construyendo 10 arbolitos más, la cantidad necesaria para terminar de juntar la plata. ¡Al final los pudo vender a todos rápidamente! Sin perder el tiempo, fue junto a su familia a comprar su tan ansiado regalo.

“Fue muy lindo comprarlo. Tuve una satisfacción enorme y el corazón me iba a mil. ¡No dejo de sonreír desde que salí de casa!”, expresó el niño lleno de la ilusión que le provoca la magia navideña.

Orgullo de Mamá Noel

Su acción es un gran ejemplo para que otros niños puedan ir tras sus sueños. Muy orgullosa, su mamá comentó a los medios: “Creo que les da un ejemplo a los chicos de su edad y a nosotros, porque demostró que cuando uno quiere algo solo hay que proponérselo y hacer que suceda”.

Por último, Guadalupe le dejó un emotivo mensaje a su hijo: “Estoy tan orgullosa de vos hijo mío, que la felicidad no me cabe en el cuerpo. Sos una excelente persona y estás lleno de propósitos y metas, las cuales veo que no vas a esperar sentado para que sucedan”.