Cuidados de la piel en verano: tips para protegerte correctamente de los rayos UV

Te contamos cuál es la forma apropiada de cuidarse del sol durante el verano, ya sea durante las vacaciones en la playa como en las ciudades.

Piel

El verano es la época ideal para disfrutar del aire libre y el sol, pero eso sin perder de vista la importancia de cuidar la piel, que, si bien debe hacerse todos los días del año, en la temporada más calurosa requiere una mayor atención, ya que aumenta mucho más la incidencia del sol.

El sol nos da beneficios, pero si nos exponemos sin protección, puede traer muchos riesgos. Entre las consecuencias más perjudiciales, que puede causar el sol, sobre todo en las horas de mayor incidencia y cuando no se cuida la piel de una forma adecuada, se encuentran el fotoenvejecimiento prematuro, manchas y cáncer de piel.

Justamente, según la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer, el 52,8% de los casos de cáncer de piel tipo melanoma en Argentina pueden ser atribuidos a la exposición a rayos UV.

Además, cabe recordar que el “bronceado” no es más que un mecanismo de defensa de la piel, que intenta defenderse de los rayos UV formando una capa de color, interpuesta entre la capa externa de la piel y el núcleo de las células que se afectan con la exposición solar.

Consejos de cuidado

-Evitar el sol directo entre las 10 y las 16hs.

-Usar sombrero.

-Usar protector solar FPS 50 o más.

-Usar anteojos con filtros UV certificado.

-Realizar chequeos dermatológicos con frecuencia.

-Hidratar la piel con abundantes cremas varias veces al día, sobre todo después de cada ducha y en zonas del cuerpo más secas.

-Evitar prendas de colores oscuros.

-Evitar completamente la exposición al sol de los bebés menores a 1 año.

-Beber abundante agua (más de 2 litros diarios).

-Prestar atención a la alimentación: optar por frutas, verduras y alimentos que contengan antioxidantes.

Qué protector solar elegir

-Nivel de protección: La exposición a rayos ultravioleta (UVA-UVB) por el efecto solar ocurren durante todo el año. En época invernal debe utilizarse un FPS30+ y en verano debe utilizarse un FPS50+.

-Período de aplicación. No debe ser mucho mayor a las dos horas para que el producto no pierda su eficacia.

-No es lo mismo el protector solar para el cuerpo que para la cara. Se debe utilizar un FPS para la cara y otro para el cuerpo, ya que el tipo de piel, la exposición y la necesidad de cada área corporal es diferente.

-Piel secas vs. piel grasa. Si tenemos piel grasa, elegiremos protectores libres de aceites o que tengan un ‘toque seco’, mientras que si nuestra piel es más seca nos beneficiaremos de protectores que se comercialicen como ‘hidratantes’.