El flamante “Tito” ya transita por las calles de Colonia Caroya. Se trata de un vehículo totalmente eléctrico, que se recarga en un enchufe de “220”, como cualquier otro electrodoméstico, y que se mueve gracias a un motor impulsado por una batería de litio de 21 kilowatts.
Para manejarlo, sólo cuenta con dos pedales, el freno y el acelerador, dado que tiene un sistema similar al de los autos con caja automática. Alcanza los 65 kilómetros por hora y tiene una autonomía de 300 kilómetros con la batería totalmente cargada.
Es un vehículo para transitar por la ciudad, dada su baja velocidad, pero resulta sumamente cómodo y seguro, además de su condición de sustentabilidad. Además, no emite ningún tipo de gas nocivo para el ambiente.
“Este es un auto totalmente eléctrico, creo que es lo que se viene en todos los órdenes de la parte comercial, donde el combustible de fósiles se va a quedar un poquito de lado, este es el vehículo que realmente se va a imponer”, expresó Daniel, propietario del vehículo.
Su presentación es similar a la de un auto convencional, más bien sencilla y con algunos sectores con terminaciones algo rústicas y mejorables. Lo cierto es que la unidad probada corresponde a esa primera tanda de producción y -según el propio directivo-luego se le fueron haciendo ajustes y mejoras.
El instrumental digital informa datos de viaje como velocidad, mientras que una tira de Leds indica el nivel de carga restante. El rubro seguridad incluye cinturones de 3 puntos y apoyacabezas en las cuatro plazas, y frenos a disco en las cuatro ruedas.
Está dotado de un motor eléctrico que entrega 4.5 kWh de potencia, el equivalente a unos 6,12 CV, que recibe energía de una batería de litio-ferrofosfato colocada debajo del piso, con una capacidad de 8 kWh.
“Lo más llamativo del caso es que la gente lo ha tomado como una novedad, con mucha simpatía, se matan de risa, nos felicitan algunos”, finalizó Daniel.
