Encuentro y Misión: El espacio de recreación de los adultos mayores

Coordinado por Pablo Barros y Paula Remis, este grupo ofrece un encuentro común semanal, talleres de tejido, danza folclórica, reciclado y teatro, que funcionan en diversos días de la semana. Las actividades se realizan en las instalaciones de la Cofradía de la Merced (Alvear 157), donde se comparte el espacio con el centro cultural Graciela Carena.

Por: Tobías Ochoa

Encuentro y Misión

Transcurría el año 2008 cuando Osvaldo Toranzo convocó a los psicólogos Pablo Remis y Paula Barros, vecinos de B° Nuevo Poeta, para coordinar y organizar una propuesta que responda a las necesidades de los adultos mayores. Encuentro y Misión nació con el objetivo de brindar un espacio de contención y estimulación del adulto, manifestándose en la generación de contenido y expresiones artístico-culturales de los mismos.

El espíritu del grupo se afirma en cuatro valores: la alegría, amistad, solidaridad y dignidad. Tanto los valores como el espíritu de este espacio se fue construyendo de manera colectiva y colaborativa en el caminar del mismo, desde un compartir comunitario que los identifica.

Lo central de este espacio se da un día a la semana de encuentro común entre sus miembros, donde se comparte la vida; mientras unos ponen los tablones, otros los manteles, alguien va haciendo el té o mate cocido, otros armando bandejas con galletas y masas o alguna tarta o torta casera, y se abre la charla, el compartir la mesa y las
vivencias.

En esos encuentros hay un poco de todo, también se abordan temas que atraviesan a los adultos mayores, comparten dinámicas, juegos, y una vez al mes no puede faltar el ¡bingo!. Aparece la guitarra, el canto, y los pañuelos al aire que danzan al ritmo de una zamba, un gato o chacarera, algún recitado o relación que surge espontáneamente; también al ritmo del paso doble, la ranchera, la cumbia o algún cuarteto de la Leo. Por lo general, las reuniones son los días viernes de 16:30 a 18:30hs.

“Se necesitan más espacios así”

“Creemos que más que nunca es necesario que haya más espacios, organizaciones que trabajen para y con el adulto mayor, en dirección a su dignidad, brindado posibilidades de expresión, de aprendizajes nuevos, de construcción de vínculos que saquen de la soledad y el ostracismo en el que tantos mayores se ven atrapados”, argumentó Pablo, para luego agregar: “Una sociedad que no valora a sus mayores es una sociedad sin futuro, condenada a derrumbarse porque nada puede construirse sin bases, sin cimientos sobre los cuales crecer”.

“A través de los Los Consejos del Abuelo, por ejemplo, realizamos una intervención urbana en la plaza San Martín que consiste en que los abuelos reparten a los que transitan, consejos escritos en tarjetas impresas, que elaboraron ellos mismos desde su experiencia y sabiduría de vida; es una experiencia muy especial y significativa no solo para los adultos mayores que pueden expresar y compartir su sabiduría, sino especialmente para quienes reciben los consejos que con mucho agrado aceptan y hasta algunos se vuelven a conversar o agradecer al adulto mayor que le entregó esa frase que justo le ayudó”, remarcó Pablo junto a Paula, su compañera de ruta.

Más información: Cel. 3512519202.