Cada 22 de septiembre, desde el año 2011, se conmemora el Día Internacional del Mimo, promovido por Jean Bernard Laclotte en homenaje a su colega Marcel Marceau. Los mimos son artistas que, sin utilizar palabras, buscan contar historias por medio de movimientos, gestos y expresión corporal.
El personaje más famoso creado por Marceau es “Bip”, surgido en 1948 y caracterizado por la ropa que usaba.
Francisco García Blaya comenzó su camino en “La Fanton Circo” hace 10 años, en el cuál desempeña papeles como payaso y ocasionalmente de mimo, además de especializarse en diversos instrumentos. “Es increíble poder decir muchas cosas desde el humor, nos posibilita entrar a lugares y ser un reflejo de lo que la sociedad no se anima a decir. Mediante la risa buscamos sanar muchas cosas”, destacó García.
La búsqueda del mensaje en las destrezas del circo
Francisco cuenta con la formación académica en Rosario sobre la materia “Mimos”, la cuál recuerda por su técnica complicada basada en “el equilibrio sobre manos”. Respecto a la mencionada técnica, Blaya argumentó: “Es muy compleja y minuciosa, constituye una rama de la acrobacia de piso, la cuál tiene un papel fundamental a la hora de armar la escena”.
Los personajes de Francisco se caracterizan por el uso de materiales no convencionales a la hora de realizar destrezas, por ejemplo, remplazar tacos de madera para hacer equilibrio por libros, lo cuáles se convierten en un integrante habitual de sus escenas.
“El circo y la actuación en mi vida son un rol muy importante, es lo que me sostiene tanto a nivel emocional como económico. Muchas veces las artes son muy egoistas o competitivas, que en el circo es distinto porque trabajamos como familia, el individualismo no existe”, finalizó.
La Fanton Circo tuvo su última presentación hace dos meses, detrás del polideportivo Cerutti, en barrio San Martín.